top of page

Adiós 2019-Un año de conocer la Bondad de Dios

Actualizado: 6 ene 2020

Salmo 136:1- “Alaben Al SEÑOR porque Él es bueno, porque para siempre es su misericordia.”


Lo sé, todos decimos en fin de año que “Dios fue bueno con nosotros aun en los días malos” al decir esto no cuestiono la sinceridad de muchas personas que han dicho éstas palabras en los últimos días, más bien quiero sumarme a los que con corazón sincero y cicatrices en el corazón pudimos experimentar su bondad de una manera íntima y real durante éste año.


1. Experimenté la Bondad de Dios lejos de casa


Dios me mostró su bondad al llamarme a salir de mi país por unos días al “otro lado del mundo”.


A finales del 2018 sentí en mi corazón que Dios me llamaba a un viaje de corto plazo a Turquía, nunca pensé que Él se lo tomaría tan en serio, no tenía ni tengo visa, no tenía ni tengo dinero, y me faltaba fe, pero Dios es más grande y poderoso, aun con todas esas limitantes dejó que las cosas se complicaran más (es gracioso, pero es cierto) a tal punto que solo me quedaba orar y decirle “Señor mira que me han negado el visado… Señor mira que no me quieren dejar salir del aeropuerto…Señor mira que no entienden mi idioma…” y cada una de esas y otras oraciones fueron milagros que me permitieron ver Su Mano poderosa obrar en medio de situaciones que de otra forma habría evitado, en Enero 31 del 2019 a las nueve de la noche llegue a Esmirna, sin haber volado nunca, sin conocer a nadie personalmente, sin visa, sin haberlo planificado durante toda mi vida y fue tanto lo que Dios hizo por mí con solo llevarme allí, que no puedo tomar crédito de nada, solo Él podía hacerlo y lo hizo.


Turquía es un país rico en cultura e historia, fue un viaje que nunca olvidare, literalmente todavía hablo de ese viaje (debo tener a muchas personas cansadas ya hehe) pero lo que más me impactó de allí fueron las personas que conocí, los hermanos en Cristo que viven día a día en medio de una sociedad totalmente contraria al evangelio, el que no es musulmán es agnóstico o ateo, fue asombroso conocer personas entregadas por completo a la obra del SEÑOR, personas que oraban por horas, que ayunaban por días, que emigraban de sus países para dedicarse a la misión, que celebran cultos aun sabiendo que pueden arrojarles piedras a la capilla o gritarles “Alá es Dios y Mahoma es su profeta” por la ventana y saber de personas que han sufrido persecución por amor de Cristo. La noche antes de partir me preguntaron por whatsapp: “¿estas triste?” Y yo respondí: “sí! voy a extrañar a estas personas”. Orar con ellos, cantar con ellos, predicar el evangelio y orar para que Dios nos diera oportunidades para hacerlo, era como vivir aquello para lo que fuiste creado.

Al Volver a casa nada fue igual y no lo es aún, ver a la iglesia de Cristo en este lado del mundo y saber que al otro lado hay gente que aún no conoce de Cristo y que no se les permite hablar con libertad de Él ha sido y es aún un pesar que queda en mi corazón y eso me permite ver la bondad de Dios.


2. Experimenté la Bondad de Dios al perder


Salmo 134:6-“Gustad, y ved que es bueno el SEÑOR; Dichoso el hombre que confía en Él.”


Dos situaciones en las que Dios me enseñó a perder para ganar me permitieron ver su bondad éste año, ambas involucraban ganar mucho dinero y en ambas tuve que tomar la decisión de declinar, primero, pude lograr un gran trato con un cliente en el trabajo el cual me daría ganancias que a la fecha nunca he podido obtener, pero éste trato trajo como riesgo el perder la confianza de un compañero por el cual he estado orando durante mucho tiempo para que venga a Cristo y a quien aprecio mucho, ya se podrán imaginar lo difícil que fue para mí postrarme delante del Señor y decirle: “Padre, tu eres bueno, si tú quieres que yo pierda en esta oportunidad para no perder a mi amigo, tómalo todo, es tuyo”. Fue una decisión difícil pero la correcta, resultó que realmente no me correspondía nada y pude evitar manchar mi conciencia y perder a mi amigo.


La segunda situación involucró una posición de trabajo en la que ganaría mucho, pero mucho dinero, lo estuve pensando, y pedí orientación a varios hermanos, mi temor era que esa posición no me permitía involucrarme en los ministerios de la iglesia como suelo hacerlo y no me daría tanto tiempo libre como necesitaba, pero le había orado al SEÑOR días antes por algo que me permitiera tener más ingresos y ésta parecía ser la oportunidad, acepte la oferta y al día siguiente allí estaba iniciando mi entrenamiento, me sentía enfermo, todo iba bien hasta que observé algo con lo que mi conciencia no podría cargar, hable con mi supervisor y le explique cómo me sentía a causa de mi fe, me dio un día para pensarlo, luego de hablar con algunos hermanos, mi familia y orar, decidí declinar y extrañamente mi corazón se llenó de paz y mi salud mejoró un poco, solo dure 5 horas en ese lugar y por dentro ya me estaba punzando el corazón.


Un amigo de Turquía público un video de su hijo citando Mateo 6:33 “Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.” Dios ya estaba confirmando que esa fue la decisión correcta. Al volver a mi antiguo puesto creo que mucha gente no entendió mi decisión, hasta que un compañero se me acerco y me dio palabras de aliento. Luego me enteré que otra persona que había estado visitando una iglesia desde hacía poco tuvo que dejar su puesto allá arriba, esa persona se me acercó y me dijo que Dios le había hablado a través de lo que me sucedió, pienso que Dios me había enviado allí por causa de ese amigo.


3. Experimenté la Bondad de Dios al verlo perdonar


Jonás 4:2 -Y oró a Jehová y dijo: Ahora, oh Jehová, ¿no es esto lo que yo decía estando aún en mi tierra? Por eso me apresuré a huir a Tarsis; porque sabía yo que tú eres Dios clemente y piadoso, tardo en enojarte, y de grande misericordia, y que te arrepientes del mal.


Si hay algo que he aprendido este año es que Dios perdona, sí y mucho más de lo que tú y yo nos atreveríamos a perdonar, meditar en esto me hizo ver en mi corazón a un Jonás escondido entre los arbustos de rencor que no había podado, el Dios a quien yo sirvo perdona al más vil pecador, por lo tanto yo debo de hacerlo también, ésta verdad fue tan impactante que desbordó en una contemplación constante de la misericordia y la bondad de Dios, oraciones de alabanza, acciones de perdón y un constante clamor a Dios para que me permitiera ser bondadoso y misericordioso como Él es, Dios me regalo poder ver eso en Él, sí en Él, ¿no es asombroso que conociendo a Dios el transforma y confronta nuestro corazón?

4. Experimenté la Bondad de Dios al verlo responder mis oraciones


Este año pude ver a Dios responder oraciones por la salvación de tres personas que conozco, ha sido asombroso como él ha ido obrando con oraciones de años atrás, esto me anima a seguir orando por mi amigo que aún no responde al llamado y también a decirte que no dejes de orar, no dejes de confiar en Su bondad nuestro Dios es bueno, y eso no depende de nuestras circunstancias, él es bueno a pesar de nuestras circunstancias, es parte de su carácter de su esencia, ya sea en la salud, o en la enfermedad, en la riqueza, o en la quiebra total, no hay nada que Dios permita que pase en la vida de sus hijos que no se para nuestro bien, y nuestro mayor bien es conocerlo a Él y estar satisfechos en Él.


5. Experimenté la Bondad de Dios en los amigos que Él me ha dado


Proverbios 17:17- "n todo tiempo ama el amigo, Y es como un hermano en tiempo de angustia."

Si no fuera porque Dios me ha dado amigos que oran por mi constantemente, que me han apoyado en todas las locuras que he emprendido (tales como un viaje a Turquía solo por dar un ejemplo hehe) creo que no sería testigo de tanta bondad hacia mí que no lo merezco, solo piénsalo, mis amigos y mi familia son las personas que más me conocen luego de Dios, y aun así me aman, eso sabiendo yo quien soy, es algo asombroso y digno de ser reconocido, estoy tan agradecido de que Dios me haya dado amigos como los que tengo, y aún hay espacio para más, “no son muchos pero Dios los puso ahí… y no tengo que dar nombres o apellidos...... porque ellos mismos ya se saben aludidos.”


Y tú, ¿Cómo has experimentado Su bondad?


21 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo
bottom of page